Reseña 138: Permafrost, de Eva Baltasar
El permafrost es esa capa de la tierra permanentemente congelada y es también la membrana que cubre a la protagonista de esta novela. Escrita en primera persona, nos presenta a una mujer en etapa de formación que se protege del exterior, que percibe la superficialidad en todo cuanto la rodea y huye de un entorno que nada tiene que ver con su manera de entender la vida: una madre obsesionada con la salud, omnipresente y controladora, y una hermana que afronta su existencia convencional con medicación y un positivismo irritante. La protagonista, que siente pulsiones suicidas, no permite que nadie se le acerque demasiado, pero al mismo tiempo se entrega con intensidad al sexo con otras mujeres, la literatura y el arte. El pulso entre el hedonismo, los placeres más carnales y la muerte es constante en esta novela, así como el tono mordaz de una protagonista que nos gana con su inteligencia y su humor negrísimo desde la primera página.
Título: Permafrost | Autora: Eva Baltasar | Editorial: Literatura Random House
Temática: Ficción | ISBN: 978-8439735144 | Precio: 16.05€ | Páginas: 144 | Comprar aquí
Eva Baltasar la autora de esta novela, creo que anteriormente ha escrito poesía ya que tiene varios premios (Tengo muchas ganas de leer algo de su poesía), pero hasta esta novela no ha entrado en el genero narrativo. En cuanto empiezas a leerlo te enganchas a su estilo y se nota en todo momento esa influencia de la poesía que se ve reflejado en su prosa mediante a elección de las palabras tan delicada que parece poesía.
Se trata de una serie de episodios de la vida de una mujer, narrados en primera persona y de forma desordenada, que tratan temas como el sexo, el amor y el suicidio. No es tan malo como suena, al contrario: tiene un humor de fondo, que compensa muy bien el dramatismo de algunas situaciones. Hay momentos absolutamente brillantes. El ritmo, a pesar de ser caótico, se mantiene bien y te arrastra hasta el final con rapidez, sin que en ningún momento el libro se haga denso.
La protagonista es una joven lesbiana, con una madre sobreprotectora y una hermana que es todo lo contrario a ella, vive cada día con una actitud positiva. Si conociera a la protagonista de esta historia en la vida real, muy probablemente me caería mal. Es irónica, irresponsable, cínica, perezosa, fría, y huye totalmente de los vínculos emocionales. Aunque creo que eso es lo que hace al personaje tan real, muestra sus miedos y dudas y no entiende la felicidad que rodea a su familia y que ella no comparte. Sus padres tienen unas expectativas demasiado altas, que mas que impulsarla hacia delante, lo que hacen es todo lo contrario. Todo esto provoca en ella una sensación de pesadumbre y ciertas tendencias suicidas.
La autora consigue atrapar al lector casi desde el principio, la protagonista tiene sentimientos de soledad e incomprensión y a pesar, de que se nos plantea un personaje con carácter fuerte vemos la fragilidad y las dudas que le surgen a lo largo de la historia y esto crea una conexión total de empatía entre el lector y la protagonista.
Lo único que todavía estoy intentando deducir si me gusta o no, es como trata el tema del suicidio, ya que es un tema muy serio y del que no he leído demasiado. En este libro lo plantea como forma de estímulo para que la protagonista quiera aprovechar todo el tiempo posible, haciendo que ese sentimiento autodestructivo que tiene, al mismo tiempo la mantiene con vida para intentar aclarar si merece la pena o no. Como os digo, me ha gustado como la autora ha transformado ese sentimiento negativo, en algo positivo, pero no se hasta que punto ¿Que opinais?
Cuando empecé a leer permafrost no creí que encontraría una protagonista tan intensa en un libro tan pequeño. No pensaba que me engancharía y gustaría tanto, ni que pudiera encontrar tanta belleza. No pensaba que este libro sería tan valiente, tan destructivo y tan profundo. Y es que este libro, como su protagonista, es mucho más (y muy diferente) de lo que aparenta.
Permafrost, es una novela recomendable, dura y ligera a la vez, que no dice nada especial pero en el fondo dice mucho. Sólo por haber conseguido este equilibrio, hay que aplaudir la autora.
¿Has leído el libro? ¿Qué te ha parecido?
¡Besos y feliz día!
0 comentarios